Si no estás seguro si la quiropráctica puede ayudarte con tu problema llámanos para una consulta de 15 minutos gratuita por teléfono, donde te daremos toda la información necesaria.

La Organización Mundial de la Salud define la quiropráctica así:

“La quiropráctica se ocupa del diagnóstico, tratamiento y prevención de las alteraciones del sistema músculo-esquelético, y de los efectos que producen estos desórdenes en la función del sistema nervioso y en la salud en general.”

Los principios de la quiropráctica son sencillos y eficaces. Nuestra filosofía está basada en el conocimiento de que un cuerpo que funciona correctamente tiene la capacidad innata de auto-recuperación y auto-regulación. Nuestra función es potenciar esta capacidad.

El sistema nervioso (cerebro, médula y nervios) controla todas y cada una de las funciones del organismo; y está recubierto por su gran escudo protector: la columna vertebral. El quiropráctico trabaja sobre la columna vertebral para mejorar así la actividad del sistema nervioso y, como consecuencia, el bienestar global del cuerpo.

La Quiropráctica se  basa en  técnicas manuales, siendo característica única de nuestra profesión el ajuste manual específico de las subluxaciones vertebrales.

¿Qué es una subluxación vertebral?

La subluxación vertebral es el incorrecto funcionamiento de una articulación vertebral, bien sea porque ha dejado de moverse de la manera diseñada o que se ha desplazado ligeramente, ejerciendo presión sobre el nervio adyacente e incrementando la inflamación local en la zona y muy comúnmente el dolor.

Sin embargo, la mayoría de nuestras subluxaciones vertebrales son indoloras al comienzo y surgen síntomas una vez que llevan ahí suficiente tiempo. Por eso, al igual que vamos al dentista a revisar cómo tenemos los dientes, también deberíamos ir a un quiropráctico a ver cómo tenemos la columna vertebral.

¿Qué es un ajuste quiropráctico?

El ajuste quiropráctico es la corrección de estas subluxaciones. Un  ajuste es una presión muy precisa y a la vez suave en la vertebra afectada para restaurar su alineación, estimulando el sistema nervioso de tal forma que permite restablecer el equilibrio de este. Generalmente se realiza con las manos pero también nos ayudamos de diferentes instrumentos quiroprácticos dependiendo de la necesidad del paciente.

Asimismo, los quiroprácticos utilizan unas camillas de diseño específico, donde realizan los ajustes en distintas posturas, utilizando normalmente las fases de la respiración del paciente para facilitar su integración neurológica.
Para el doctor en quiropráctica son importantes los aspectos del estilo de vida que el paciente tiene, ya que puedan estar jugando un papel en el desarrollo de sus problemas.